Si el perfil "cloudlinux-default" en Tuned está causando un mayor consumo de energía y temperatura del CPU, podrías considerar usar un perfil diferente que se ajuste mejor a tu entorno específico del servidor. Aquí te explico qué puedes hacer:

Comienza listando los perfiles disponibles para ver si hay uno que se ajuste mejor a tus necesidades:

Listar perfiles disponibles:

tuned-adm list

Esto mostrará una lista de los perfiles disponibles.

Selecciona un perfil que esté más alineado con tus requisitos. Por ejemplo, podrías elegir el perfil "power save":

Cambiar a un perfil diferente:

sudo tuned-adm profile powersave

Reemplaza "power save" con el nombre del perfil que consideres más apropiado para tu sistema.

Monitorear el consumo de energía y la temperatura:

Después de aplicar el nuevo perfil, monitorea el consumo de energía y la temperatura del CPU para ver si hay alguna mejora. Usa herramientas como "sensors" o las utilidades de monitoreo específicas proporcionadas por tu hardware.

Crear un perfil personalizado (opcional):

Si ninguno de los perfiles existentes satisface tus necesidades, considera crear un perfil Tuned personalizado adaptado a las necesidades de tu servidor. Esto requiere ciertos conocimientos sobre los parámetros de configuración del sistema.

Ajustar la configuración del perfil (avanzado):

Si te sientes cómodo ajustando el sistema de manera avanzada, puedes modificar manualmente la configuración en el perfil "cloudlinux-default" para que se adapte mejor a tus necesidades. Sin embargo, ten cuidado al hacer estos ajustes y asegúrate de probarlos a fondo.

Contactar con el soporte de CloudLinux:

Si estás usando CloudLinux y experimentas problemas con su perfil predeterminado en Tuned, puede ser una buena idea ponerte en contacto con el soporte de CloudLinux. Ellos pueden tener recomendaciones específicas o ideas sobre cómo ajustar la configuración para tu entorno particular.

Siempre ten cuidado al hacer cambios relacionados con la optimización del sistema, especialmente en un entorno de producción. Es una buena práctica probar los cambios en un entorno controlado primero para asegurarte de que tienen el efecto deseado sin causar efectos secundarios negativos.